La mariposa lleva consigo el secreto del renacimiento: la magia de convertirse en algo nuevo, de dejar atrás lo que una vez fue y desarrollarse en una nueva forma.

Nuestra mariposa no es la criatura fugaz de un día de verano. Tiene una forma imponente, para honrar la importancia de la transformación, pero su espíritu permanece ligero, prometiendo la libertad que nos espera.

Este talismán es para cada etapa del cambio: para quienes ya se han transformado, para quienes están en medio de ella y para quienes se encuentran al borde de nuevos comienzos. Un recordatorio de que toda transformación conduce a la belleza, y que más allá de cada punto de inflexión se encuentra el momento en que las alas se abren para volar.

— Plata de ley / 925